No sé vosotros, pero yo, cuando era cría y era la hora del recreo en el colegio, además de jugar al escondite, a liebre, a cárcel, a línea, con las Barbies y posteriormente, su versión cani, las Bratz... cambiaba cromos.
La verdad es que recuerdo unas cuantas colecciones empezadas... pero sólo conseguí terminar un álbum: el de Harry Potter, porque yo siempre tuve afición a leer y por aquel entonces devoraba los libros de la Rowling y del señor Tolkien.
Llevo un rato buscando en Google una foto del álbum en cuestión, (le haría una foto al mío, pero me da mucha pereza, y si, aún lo conservo) y todas las que aparecen son de las colecciones que salieron con cada película, y mi álbum es más pro, era un álbum de cromos del primer libro, de cuando todavía no había salido peli ninguna y no había actores, de cuando no había otra cosa que ilustraciones. No encontré el álbum, pero si encontré una imagen del sobre de cromos.
Los cromos de Potter me dieron bastante lata, sobre todo uno en cuestión: Era dorado, brillante y con el escudo de Hogwarts en medio. Si la memoria no me falla, era el 82. No os podéis imaginar las vueltas que una mini Marina de diez años dio por aquel patio buscando el dichoso cromo... con un taco de cromos repes enorme.
Escribiendo esto, llegué a la conclusión de que debí de movilizar al patio entero para buscar aquel cromo, porque cuando por fín alguien lo consiguió, vino una avalancha de enanos a presenciar el famoso intercambio: el 82 a cambio del taco completo de cromos repes.
Ahora no colecciono cromos, pero hago colección de otras cosas.
Hace ya un tiempo, empecé a coleccionar grupetes femeninos de indie-loquesea. Y hace más o menos dos meses, empezasteis a ser partícipes de ello, cuando me dio por traeros a estos lares a señoritas como Russian Red, Zahara o Anni B. Sweet.
Hoy vengo con dos hermanas de Gijón, Mar y Alicia, o lo que es lo mismo: Pauline en la Playa.
Pauline en la Playa comenzó su andadura musical de forma profesional hace ya diez años. Líderes del grupo pop íntegramente femenino Undershakers, llegaron a la conocida discográfica independiente Subterfuge en el año 1995. Allí, con esta primera banda editaron durante cinco años tres discos de larga duración y dos mini CD. La acogida, tanto de la crítica como del público, puso a esta banda entre las más importantes del movimiento independiente español de los años noventa.
Todavía con Undershakers en activo, Mar y Alicia comenzaron a formar otro proyecto en paralelo para dar cabida a aquellas composiciones que no tenían lugar en un proyecto exclusivo de pop. Sus estudios de armonía, composición e instrumentos modernos en la Escuela de Música Creativa de Madrid pusieron a las hermanas en contacto con otros estilos musicales, así como con músicos provenientes del jazz, que actualmente las acompañan como banda en la formación de Pauline en la Playa.
Con el premio del concurso de maquetas de Radio Kras en 1997 como garantía de las posibilidades del nuevo proyecto, la discográfica Subterfuge apostó de nuevo por las hermanas y en 1999 saldría el que sería su primer disco: Nada como el hogar. La excelente acogida de público y crítica consolidó el proyecto y coincidiendo con la retirada de Undershakers, Mar y Alicia se volcaron por completo en esta nueva andadura.
Hoy os traigo su último disco que, por cuestiones Spotifianas, es el que más tengo escuchado, pero conste que desde hace poco tienen el resto de la discografía en la base de datos y me estoy poniendo al día.
La verdad es que es un disco muy cotidiano, con letras muy del día a día, pero no por ello menos trabajadas, todo lo contrario, de hecho son las mejores letras que he visto en mucho tiempo. Es un disco que no entra a la primera y que hay que ponerse a escuchar con las letras delante, porque ya digo que no tienen desperdicio ninguno.
Desde un punto de vista bastante sencillo y metafórico nos encontraremos ante canciones que hablan de relaciones, con sus momentos tristes y sus situaciones alegres...
Esconderé
mis penas, que no puedas encontrarlas.
Alargaré mis brazos por taparlas,
y buscaré
algo para envolverlas
y olvidarlas antes de que vuelvas.
(Un muelle)
Y no hay más que vernos.
Y es que no hay más que vernos
Aún hay días que
lo pienso y me cuesta creerlo.
¡Quién lo iba a decir!
de mí y de ti,
de ti de mí.
Pasando la noche en vela
dando caza a los mosquitos,
haciendo el amor a gritos,
muertos de la risa en la cocina
despegando la tortilla
mientras me comes a besos
y me siento tan feliz…
(Quién lo iba a decir)
Así sin más, que ando algo liada de tiempo porque en la Facultad ya empiezan a meter caña y habría que comenzar a ponerse en serio a hincar codos, os dejo con este discazo, de las de Gijón, que espero que lo disfrutéis.
Pauline En La Playa – Física Del Equipaje
Hasta otra!
2 comentarios:
Hum, yo era más de los tazos y los gogos. A mi eso de los cromos me desesperaba por que nunca conseguía completar las revistas esas.
Bueno, no tenia ni repajolera idea que este grupo existiese, así que por curiosidad empecé a escucharlo.
Bueno me han gustado las de Gijón, música agradable al odio y letras guapas, pero no es lo mío, quizá demasiado suave.
Un post de estos de investigación no? mola. A seguir así! Un saludo
veamos, respecto a las colecciones: de pekeño me encantaban, y recuerdo un dia q mi madre me compro uno de esos famosos STICK-STACK q me puso (como diria una bratz cani) tohhh contentohhh y toohhh reshulonnnnn jajajajajajaja. respecto al grupo: como bien me dijiste no es de mi estilo PERO tienen a mi favor dos cosas: la primera es q al mnos hacen musika y se la curran (no como en otros estilos musikales q en fin...) y lo segundo pues q son de Gijón :D y ambas cosas fusionadas pues me bastan pa decirles: no os escucharé, pero seguid asi!!!!
buena entrada, Marina :)
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